DESARROLLO HISTÓRICO Y FILOSÓFICO DE LA RETÓRICA

La retórica se inicio en Grecia alrededor del siglo v a. C, pero su evolución se ha venido dando desde los primeros hombres, cuando estos sintieron la necesidad de una forma de comunicación que en un principio era por tradición oral y después evoluciono hasta la escritura.
Se dice que la retórica fue inventada por Córax, un habitante de la ciudad de Siracusa, hacia el año 476 a. C con el fin de que por medio de un discurso, fuera verídico o no, lograra convencer a un publico de la inocencia de un acusado, otros dicen que se inicio con el fin de integrarse dentro de la política.

Inicialmente la retorica trata de reflejar aspectos sobre su desarrollo y la filosofía:

• Los sofistas desde cualquier punto de vista trataron de enseñar la retórica como un arte en el cual el interlocutor no solo lograra dar a conocer su experiencia - su punto de vista sino que además jugara con la retroalimentación del grupo, para lograr que esta sea dinámica, llegando a lo que podría ser un debate en el cual se expusieran diversos puntos de vista.

• Las principales estructuras educativas y la contribución al desarrollo del espíritu crítico, sin embargo, esta ciencia ha sido tomada como un arma de defensa en contra de opiniones o críticas, para defender un punto de vista; se aleja de la ética, de la verdad y no se tiene en cuenta la palabra como un camino de retroalimentación sino que se basa en falacias.

• La enunciación del discurso que debe ser realizada por el orador para lograr definir los criterios con los que el público sienta la importancia del auditorio como elemento central del proceso persuasivo y la consideración de las circunstancias del proceso retórico, dos de los puntos centrales del análisis que se propone la retórica.

• El conocimiento desde el cual el orador debe partir para lograr convencer al receptor, teniendo en cuenta el buen manejo del tema y la correcta exposición del mismo.

• La dinámica con la que se maneje el discurso, teniendo en cuenta el interés que logre despertar en pocos segundos sobre el público y para esto es importante la actitud y la tranquilidad sobre el mismo.

• El orador debe tener en cuenta el desarrollo histórico sobre el cual se maneje y las condiciones a las que se debe acoplar, sin olvidar el nivel del información con el que pueda llegar a contar el público.